A raíz del comentario de un lector en mi último artículo en el que hablaba sobre los saques de banda, me propuse escribir acerca de ciertas modificaciones en el reglamento, tanto a nivel formativo, como a nivel profesional.
Cada fin de semana me sangran los ojos cuando veo que en las categorías más bajas se producen resultados de 21-2, 16-0, 15-3 y un largo etc. De verdad, ¿no hay manera de cortar semejante sangría? Yo creo que sí. En primer lugar se podría excluir a un jugador, el que el entrenador decidiera, del equipo que va por delante en el marcador cuando la diferencia sea de más de determinados goles. Otra medida sería la de hacer cuatro tiempos de menor duración y que cada tiempo fuera un gol para el equipo ganador, de esta manera la máxima diferencia en el resultado final sería de 4-0. Esta medida existe en algunas comunidades en Fútbol Sala.

A nivel más profesional existen varías alternativas. Partamos de la base que el Reglamento está hecho para favorecer el espectáculo, y cualquier aspecto que vaya en contra de él es sancionable.
Mi primeras dos propuestas son para el saque de banda, ¿posibilidad de sacar con el pie?, esto quizás obligaría a cambiar la regla del fuera de juego en este tipo de acciones. La otra posibilidad es la de que cada equipo ejecutor disponga de diez segundos para efectuar el saque al igual que el portero cuando tiene el balón en la mano, de no ser así la posesión pasará para el equipo contrario, podríamos aplicarla también a las faltas teniendo en consideración la colocación de las barreras, etc. De esta manera favoreceríamos el espectáculo y que los equipos no perdieran tanto tiempo cuando se encuentran con el marcador favorable. Esta opción solo la barajo en el fútbol profesional porque a nivel amateur y fútbol base es más complicado que si un balón se va lejos por el motivo que sea éste vuelva en el menor tiempo posible.
Por último, ¿qué pasaría si ante un determinado número de faltas damos la opción de una especie de doble penalti o acción beneficiosa para el perjudicado? En el fútbol moderno los equipos suelen ser cada vez más físicos, más agresivos y en ocasiones para contrarrestar la calidad de sus rivales realizan numerosas faltas. Esta medida sin duda haría buscar otras vías más tácticas para minimizar el daño producido por los Messi, Vinicius, Neymar, y abogaría por un mayor número de goles, lo que sin duda el aficionado agradecería.