La humildad a veces, en la especialidad del periodismo deportivo, brilla por su ausencia. Otra tunda de España a Malta, Sólo faltó un gol de Villa , La Selección tiene futuro, 7-0: España se da un festín a costa de Malta, son algunos de los titulares tras la goleada del combinado nacional a la selección de Malta. Siete goles, sí. Buen juego, rápido en asociación y descaro en la pugna por cada balón, más el buen hacer de jugadores que viven una segunda juventud, como Navas y Cazorla, son motivos que invitan al optimismo.
Moreno vive un momento dulce tras este partido, aún con su renovación en el aire, e hizo recordatorio de que la seriedad con la que el equipo afrontó el partido parecía presagiar otros doce goles y así volver al espíritu del famoso doce a uno.
Se habla poco de que esos seis puntos puede que se eliminen del casillero de la selección, debido a que al estar en un grupo de seis, se restan los puntos logrados ante el último clasificado. Islas Feroe o Malta son las candidatas dado su calidad en plantilla. Así se igualan con los grupos de cinco equipos. Es decir, hay que ganar a Rumanía para ser cabeza de serie. Rumanía no dejará tantas facilidades como Malta. Y se debe ganar y convencer.

Malta no tiró a puerta, no ofrecieron sensación de incomodidad en ningún lance del juego. Les honra que cada vez más mejoran en el aspecto posicional y el trabajar como un bloque conjunto. El partido recordó a aquellos gritos del Sabio de Hortaleza a Xavi Hernández en un cinco a cero a San Marino: «Tira, se meten solos». Ello no debe dar pie a los titulares antes citados. Malta merece respeto, cualquier rival lo merece.
Es cierto, no es fácil meter siete goles. Sería hipócrita no decir que olía a goleada. Cuando se produce, hay que tener los pies en el suelo. Está en camino una revolución, no son fáciles. Venimos de un Mundial desastroso y de una Liga de Naciones de olvido, con equipos mucho más potentes que Malta.
Qué fácil es hacer castillos en el aire, aunque hay que construir cimientos sólidos. Este joven equipo va en camino, pero debe tener muy claro que no todos los partidos son Malta. Ya hemos visto qué pasa cuando hemos vendido la piel del oso antes de cazarlo. Recordemos los empates ante Noruega y Suecia.