El 2018 ya ha traído las primeras noticias a la Liga Iberdrola. Este pasado fin de semana concluía la primera vuelta de la competición con el título de campeón de invierno en juego. Barcelona y Atlético de Madrid se disputaban llevarse este título honorífico. Ambos llegaban empatados a puntos y salieron de la misma manera, ya que se llevaron la victoria en sus respectivos encuentros. Así que las azulgrana, por la diferencia del gol average (suman 57 tantos por 37 de las madrileñas) se convertían en campeonas de invierno, un hecho que se le resistía tres años.
Si bien es cierto que ello no conlleva a nada, sí que alimenta los precedentes de que quien lo consigue es el mismo que acaba llevándose el título a final de temporada. El único hecho diferencial es que esta vez las azulgrana no lo han logrado por sumar más puntos que sus rivales, sino por la diferencia de goles a favor.
Si la parte de arriba sigue muy igualada, la de abajo no lo es menos. Cada vez está más claro que el Zaragoza no remonta cabeza, ya que sólo ha ganado uno de los quince encuentros disputados y lleva cinco puntos. El penúltimo en la Liga Iberdrola, el Santa Teresa, once. Y posteriormente, se abre una brecha de cuatro conjuntos empatados a quince puntos: Sporting de Huelva, Fundación Albacete, Real Sociedad y Sevilla.

Si el conjunto andaluz es la cruz, su rival de la ciudad, el Betis, es la cara. Ambos se enfrentaron el pasado fin de semana en el primer derbi que disputaban en la máxima competición. El equipo entrenado por María Pry (la única mujer en los banquillos), ha ido de menos a más y actualmente ocupa la séptima posición que da derecho a jugar la Copa de la Reina. Lo lograron tras ganar el derbi con un gol de Rocío Gálvez, a los cuatro minutos.
Como ya ocurrió el año pasado, parece que todo va a estar hasta el final muy igualado, lo que hace aún más interesante la Liga Iberdrola.