Tras una semana apasionante de partidos de selecciones nacionales, ya tenemos el cuadro de participantes del Mundial de Rusia 2018 casi totalmente definido. En algunos casos, ya tenían el trabajo hecho desde hace tiempo (como por ejemplo los brasileños), otros (como España) lo tenían fácil para rematar la tarea y, en el lado más apasionante, equipos como Argentina o Portugal, que sudaron tinta para que las dos máximas estrellas del planeta fútbol no se quedaran en casa el próximo verano.
En cifras, tenemos 23 selecciones ya clasificadas de las 32 que disputarán la cita global. Restan cuatro plazas europeas, que se derivarán de las repescas a cara o cruz entre los ocho mejores segundos de los nueve grupos en disputa. También queda una jornada en las liguillas de clasificación africanas, de donde saldrán tres clasificados más. Los otros dos vienen de repescas entre diferentes confederaciones (CONCACAF ante Asia y Oceanía ante Sudamerica). Todo ello se decidirá en la semana de selecciones de Noviembre, para alcanzar el sorteo, a celebrar en el Kremlin, el ya próximo uno de Diciembre. Repasemos como ha sido el camino de las 209 selecciones que iniciaron la clasificación en cada Confederación.
En África arrancaron 53 selecciones. Entre ellas, las 26 con peor ranking FIFA se cruzaron en eliminatorias directas para definir 13 ganadores que se volverían a cruzar con las 27 selecciones con mejor ranking. Entre esas 40 selecciones se dirimieron 20 eliminatorias, y entre las 20 escuadras vencedoras se sortearon cinco grupos de cuatro equipos en formato de liguilla.
El campeón de cada grupo, va directamente al Mundial. De los cinco clasificados finales, hay dos que ya tienen matemáticamente conseguido el billete: Nigeria y Egipto. En los otros tres grupos, una plaza se juega entre Túnez y Congo; otra entre Marruecos y Costa de Marfil; la restante tiene tres pretendientes: Senegal, Burkina Faso y Cabo Verde. Clásicos como Camerún, Argelia o Sudáfrica ya no tienen opción.
La clasificación en Asia es incluso más compleja, constando de cuatro fases. En un primer momento, de entre los 45 participantes los 12 equipos con peor ranking de la región disputan seis eliminatorias directas, cuyos seis vencedores entran en una fase de grupos de 40 equipos (ocho grupos de cinco componentes). Los campeones de cada grupo y los cuatro mejores segundos clasificados (12 equipos en total) pasan a otra liguilla en dos grupos de seis equipos. El primero y el segundo de cada grupo, se clasifican directamente para el Mundial.
Entre los terceros juegan un play-off que envía al ganador a la repesca contra un equipo de la CONCACAF. En este caso, los clasificados de forma directa han sido Arabia Saudí, Irán, Japón y Corea del Sur. Mientras que a la repesca accedió Australia tras derrotar a una dignísima Siria, que realizó un notable papel a pesar de la terrible situación de su país. China volvió a demostrar no estar a un buen nivel competitivo pese a los esfuerzos de promoción del fútbol en aquel país.
En Europa sin embargo, el trámite es bastante más sencillo. Parten 54 equipos (Rusia sería el 55, pero queda exento como anfitrión), que quedan distribuidos en nueve ligas de seis equipos. Los nueve primeros clasificados obtienen el billete directo, de entre los nueve segundos, queda fuera el que tenga menor puntuación y se sortean cuatro play-offs con cabezas de serie para definir los últimos cuatro clasificados para el Mundial. Una vez finalizadas las liguillas, están en el Mundial Alemania, Bélgica, España, Francia, Inglaterra, Islandia (la gran sorpresa), Polonia, Portugal y Serbia. A la repesca irán Croacia, Dinamarca, Italia y Suiza como cabezas de serie y Grecia, Irlanda, Irlanda del Norte y Suecia para enfrentarse a ellos. Eslovaquia, peor segunda de las liguillas, se ha quedado en puertas de seguir luchando por un billete. Otros, como la mítica Holanda (en profunda crisis) o Gales se han quedado fuera de cualquier opción.

En la Confederación de Norte y Centro América y Caribe son 35 los equipos participantes. Su clasificación es seguramente la que precisa de más fases diferentes. De las 14 selecciones con peor ranking de la Confederación se eliminan siete por play-off directo. Esas siete selecciones vuelven a cruzar con las 13 inmediatamente superiores, para determinar 10 eliminatorias directas. A los 10 ganadores de estas eliminatorias se les vuelve a cruzar con las dos selecciones que ocupen los siguientes puestos del ranking.
Los seis ganadores de esas eliminatorias se unen a las seis selecciones con mejor ranking de la Confederación para crear tres grupos de cuatro competidores. Los dos primeros de cada uno de estos grupos pasan al hexagonal final. En esa liga a seis, Costa Rica, México y Panamá han logrado la clasificación directa, mientras Honduras (cuarta clasificada) irá a la repesca ante Australia. Sorprende de este intrincado sistema de clasificación que sobreprotege a los equipos más poderosos que se haya quedado fuera Estados Unidos, un país cuyo soccer parecía en franca progresión.
Oceanía es la única Confederación que no reparte ninguna plaza directa al Mundial. También son la Confederación con menos nivel, que cuenta con 11 países. Las cuatro selecciones con peor ranking disputan una liguilla, de la que el campeón se encuadrará con los siete equipos restantes en dos grupos de cuatro selecciones. Los tres mejores de cada grupo pasan a una siguiente ronda en la que se crean dos liguillas de tres selecciones. El ganador de cada una de estas ligas juegan una final a doble partido tras la que el ganador pasa a jugar la repesca por una plaza en el Mundial con un representrante de Sudamérica. En este caso, Nueva Zelanda derrotó a las Islas Salomón en esta última fase y luchará con Perú por una plaza en Rusia. Los kiwis son claros dominadores de esta Confederación tras la marcha de Australia.
Por último, la Confederación Sudamericana, que solo cuenta con 10 equipos, tiene el sistema más sencillo de Clasificación pero que suele tener resultados apasionantes. Se trata de una liguilla entre esos 10 países que otorga la clasificación directa a los cuatro primeros y la opción de repesca al quinto clasificado. Brasil la ha liderado con mucha suficiencia, seguido de Uruguay, Argentina (que sufrió hasta el último partido pero finalmente, de la mano de Messi, entró como tercera) y Colombia. La repesca será para Perú, que ante Nueva Zelanda tendrá la opción de volver a la élite mundial muchos años después. Sorprende que la actual campeona de Sudamérica, Chile, se haya quedado fuera.
Pues nos queda por delante casi una temporada completa hasta que el balón arranque a rodar en un nuevo Mundial, pero la competición más prestigiosa del balompié se ve venir y centrará muchos comentarios hasta entonces.