Sabemos que la historia se compone de todos los hechos acontecidos a lo largo del tiempo. Algunos serán recordados más que otros con independencia de si estos han sido negativos o positivos, aunque normalmente lo bueno nunca se olvida y permanece en el tiempo. Sin embargo, a veces en el Fútbol sucede todo lo contrario y cuesta mucho olvidar los tropiezos y meteduras de pata que salen a la luz una y otra vez.
Podríamos decir que esto mismo es lo que le pasó ayer al Real Madrid cuando todos los medios deportivos abrían con el batacazo copero de los blancos y tiraban de historia para recordar las eliminaciones que llevaban a sus espaldas en los últimos años.

Y es que anteanoche el equipo de Zidane fue despedido entre abucheos por el público del Bernabéu que presenció cómo su equipo no fue capaz de vencer al Leganés en su propio campo. El gol de Benzema fue el único momento del partido en el que los aficionados dieron un respiro a un equipo que no se lo mereció. A un conjunto que lleva semanas sin merecérselo ya que su pésima situación en Liga no ayuda a que la eliminación copera se supere sin hacer herida.
El Leganés, un equipo por el que nadie apostaba desde que se celebró el sorteo hace un par de semanas, volvió a demostrar que los pequeños tumban a los grandes y eso es algo de lo que el Madrid sabe demasiado. La historia de los blancos está repleta de eliminaciones en la Copa del Rey en las que los rivales han jugado incluso en Segunda B.
En el año 2000 el Toledo eliminó al Madrid por un 2 a 1 en un momento en el que la Copa se jugaba a un solo partido. Los manchegos dejaron a los madridistas fuera de la competición a pesar de estar jugando en Segunda B. Unos años después, en la temporada 2008/2009 el Irún dejó fuera al ahora club de Florentino por los goles marcados fuera de casa. El equipo guipuzcoano ganó la ida con un 3-2 y pasó de ronda a pesar de haber perdido la vuelta por 4-3 en casa merengue.
Estaba Pellegrini al mando del banquillo blanco cuando sucedió el famoso ‘alcorconazo’ en dieciseisavos de final que eliminó al Real Madrid después de soportar una goleada por 4 a 0 que estos no fueron capaces de remontar en la vuelta jugada en casa. Y hace un par de años fue el Cádiz quien los eliminó de la competición aunque esta vez fue por alineación indebida del Madrid, lo que le costó la expulsión de torneo.

Por unos motivos u otros, el Real Madrid ha vuelto a ser eliminado por un club al que poca gente le apostó en las quinielas antes del partido del miércoles por la noche. Y así se quedan los blancos, tocados y muy pero que muy hundidos tras esta nueva derrota y la reducción de posibles títulos a conquistar este año.
Ahora, tras los muchísimos puntos que los separan del Barcelona en Liga, las energías blancas están puestas en el partido de Champions del próximo 14 de febrero contra el PSG. Hasta entonces, poco podrán hacer los madridistas para devolver el ánimo y la ilusión a su decepcionada afición.