Los clubes históricos del fútbol francés se enfrentan este domingo (21 horas) en el clásico “Choc des Olympiques”, o “Choque de los Olímpicos”: Olympique de Lyon y Olympique de Marsella.
El gran partido actualmente en la Liga Francesa es el PSG-Mónaco por el potencial económico de estos clubes y porque en ellos se concentran las grandes estrellas del campeonato, pero el duelo de los Olympiques siempre cuenta con argumentos históricos y actuales muy atractivos para no perdérselo.
Esta temporada veremos enfrentarse en los banquillos al exfutbolista del Lyon y debutante en un gran club, Hubert Fornier, contra el experimentado técnico argentino el “Loco” Bielsa. El Marsella ha comenzado muy fuerte la competición de Liga (Ligue 1) liderando la tabla, mientras el Lyon ha iniciado la temporada muy irregular.
El estadio Gerland volverá a ser un año más el escenario de este clásico partido de la Ligue 1. Este recinto se empezó a construir en 1913, pero la Guerra Mundial provocó que la finalización de las obras se aplazara varios años. Como anécdota hay que contar que en las labores de construcción participaron prisioneros de guerra alemanes.
El estadio fue creado con pista de atletismo y ciclismo, pero con el éxito de público en los partidos de fútbol el aforo se acabo ampliando. El del domingo será uno de los últimos Choc des Olympiques en este lugar, y es que está en construcción el nuevo Stade de Lumières, que se convertirá en el primer estadio totalmente privado del fútbol francés de élite.
Ensombrecidos por la crisis
Es cierto que las plantillas actuales de ambos clubes, Lyon y Marsella, no son ni mucho menos las mejores de su larga historia. El síntoma más claro de ello es que ninguno de estos dos grandes clubes juegan este año competición europea. El Marsella finalizó la temporada pasada en sexto lugar, que en Francia no tiene premio europeo, mientras que el Lyon terminó quinto y si consiguió una plaza de Europa League, pero en la previa de esta competición cayó eliminado por al Astra rumano.
El Olympique de Lyon, que derrotaba constantemente al Real Madrid en Champions hace unas temporadas, ya no es ni la sombra de lo que fue. La crisis económica ha golpeado fuertemente a aquel club que realizó su mejor participación en la Liga de Campeones en la temporada 2009-2010 cuando cayó ante el Bayern Múnich en semifinales.
Hace una década el Lyon era claro dueño del campeonato francés, ganó siete Ligas seguidas, pero ahora sufre por clasificarse para Europa y no gana el torneo desde hace 7 temporadas. Los últimos veranos han tenido que vender a sus estrellas y se ha reforzado con jóvenes pero inexpertos talentos. El ejemplo de este Lyon venido a menos es su entrenador, Hubert Fournier, un hombre de la casa (ex futbolista del Lyon) con experiencia solo en equipos muy modestos del fútbol francés.
Por su parte, el otro Olympique, el de Marsella, vuelve a vivir en la constante montaña rusa que ha sido su historia. Cuando ha conseguido éxitos relevantes, al poco tiempo ha cosechado fracasos sonoros. Por ejemplo, uno de los mejores Marsellas de la historia (el de Cantona, Völler…) pasó de ganar Ligas y una UEFA al Milan para acabar bajando de categoría por amañar un partido. Curioso aquel hecho, ya que supuestamente se compró a un rival para evitar que lesionasen a jugadores del Marsella antes de la final europea, y en las celebraciones de aquella UEFA ganada al Milan, los aficionados del Olimpique gritaban “A jamàis les premiers” (Siempre seremos los primeros).
En la actualidad, tras los años gloriosos de Deschamps en el banquillo cosechando una Ligue 1 (2010) y tres Copas de la Liga, el equipo se ha difuminado en terreno de nadie, terreno del que ahora parece emerger. Con jugadores como el joven talentoso Thauvin y el delantero Gignac están obligados a ser otra vez protagonistas de la Liga francesa.
Clasificarse para Europa era un objetivo innegociable para una plantilla entrenada por el siempre exigente Marcelo Bielsa, pero el gran inicio en Liga ha provocado que aun se le exija más a esta plantilla y ya se piense en ganar el campeonato. La afición del Marsella está encantada con su nuevo entrenador al que ven como el gran «culpable» de la racha triunfal de este arranque de temporada.
El Olympique de Lyon ha conseguido colocarse cuarto en la tabla tras ganar 5 goles a uno al Montpellier en la última jornada, tras un inicio de competición bastante irregular. Mientras, el Olympique de Marsella llega a este duelo tras vencer 2 a 0 al Toulouse y manteniendo con firmeza su primera posición en la clasificación, siete puntos más que su perseguidor más cercano, el millonario PSG.