Corría el minuto 33 de la final que la selección española y la alemana estaban disputando como colofón al Campeonato del Mundo de Austria y Suiza de 2008. Una carrera en velocidad le llevó a superar al jugador alemán Lahm y sortear la salida del portero Lehmann permitiendo que el balón que tenía entre los pies se colase en la portería rival. Era el único gol del partido pero la Selección Española solo necesitaba ese tanto para alzarse con el título de campeona de Europa, y de ello, en parte, es responsable Fernando Torres.
Un delantero español que cuenta con un extenso palmarés, sobre todo, después de su salida del Atlético de Madrid en el 2007 para abrirse camino en la Premier League, donde sería años después tan querido como odiado.
Imaginamos que abandonar el club donde has crecido y te has forjado como futbolista, e incluso como persona, no ha de ser nada fácil. Pero en ese momento se mezclaron una serie de circunstancias que hicieron creer al 9 colchonero que la marcha a la liga inglesa, para fichar por el Liverpool de Rafa Benítez, era la mejor de las opciones que tenía, tanto para él, como para su equipo.

Así que salió del Calderón, donde debutó el 27 de mayo de 2001 frente al Leganés, para llegar a Anfield y formar parte de los reds, un equipo en el que marcó 65 tantos a lo largo de sus cuatro temporadas, consiguiendo el cariño y el respeto de todos los seguidores del club inglés que a día de hoy, siguen profesándole su admiración.
Pero tras cuatro campañas luciendo la camiseta del Liverpool el destino del niño Torres cambió de ciudad en el Reino Unido para llegar hasta Londres, concretamente a Stamford Bridge, donde saltaría al terreno de juego por vez primera en febrero de 2011 para anotar el segundo tanto que dejó los tres puntos para los blues. Sin embargo, la carrera de Torres en el Chelsea no ha sido la mejor porque tras cuatro temporadas siendo el delantero puro del conjunto inglés solamente marcó 18 goles.
Unos resultados personales que comenzaron a empeorar tras la llegada de José Mourinho la pasada temporada quien finalmente decidió que la mejor opción era ceder al jugador para que el madrileño tuviese alguna opción de jugar esta temporada. Una cesión que ha situado a Fernando Torres en Milán para formar parte del conjunto rossonero durante dos años pero en el que tampoco está viviendo su peor etapa puesto que después de 10 partidos vistiendo la camiseta del equipo italiano tan solo ha marcado un gol.

El papel irrelevante que el delantero está teniendo en el equipo dirigido por Filippo Inzaghi ha llevado al club a sopesar la posibilidad de devolver al jugador nuevamente a Londres para que termine la temporada con su exequipo. Una idea que parece no va a llegar demasiado lejos puesto que el técnico portugués ya ha confirmado ante los medios de comunicación que no cuenta con el jugador de Fuenlabrada. Un presente convulso para el delantero madrileño que también le hace tener que plantearse un futuro alejado del Chelsea y del Milán.
Ya el pasado verano se publicaron informaciones acerca de una posible vuelta de Fernando Torres al Atlético de Madrid para situarse a las órdenes del Cholo, sobre todo, después de la marcha de Diego Costa. Una posible llegada que finalmente nunca sucedió y que vuelve a sonar con fuerza inducido por el complicado momento profesional que está viviendo en Italia.
El mercado de invierno está a punto de abrirse y no se sabe si el futbolista cambiará de destino o si finalmente se quedará en Italia hasta final de temporada. Lo que sí está claro es que el delantero español no pasa por su mejor época profesional y quizá solo necesita un revulsivo para volver a saltar al campo con la única intención de meter el balón en la portería contraria levantando a su paso a la grada y dejando claro que puede retornar el mejor Torres reviviendo momentos sobre el césped, como aquellos que valieron un campeonato de Europa.