Finalmente, una vez acallados los tambores que llamaban a la huelga, el domingo tendremos jornada de Liga. Al tratarse de la penúltima, es una obviedad indicar que quedan muchas cosas por decidir y muy poco margen de error para casi todos los equipos. Sin ir más lejos, queda por responder la más importante de las preguntas que suscita cada campeonato ¿quién será el campeón? El domingo un poco antes de las 9 de la noche podríamos saberlo.
Dada la unificación de horarios propia de las últimas fechas del campeonato, todo se juega a las 7 de la tarde del domingo, sin que ningún partido se descuelgue de esa cita, dado que en todos hay algún objetivo aun en juego. A la antigua usanza, todos a jugar a la vez y los transistores echando humo.
Empezando por abajo, el Eibar, paradigma del equipo revelación en la primera vuelta que se hunde en la segunda, viaja a Getafe buscando salir de puestos de descenso, donde nadie esperaba que estuviese hace escasos meses. Esa dinámica negativa suele ser difícil de variar en las últimas jornadas. Los locales por su parte aun no están salvados matemáticamente, de ahí que no puedan conceder ni una ventaja.
El Granada de Sandoval viaja a San Sebastián para enfrentarse a una Real que ya no tiene objetivos pendientes. Al contrario que el Eibar, los nazaríes han tomado aire con la llegada del nuevo técnico y parecen convencidos de salvarse, a pesar de tener una salida difícil. De reojo mirarán al Atlético – Barça esperando que venzan los colchoneros para que les visiten sin objetivos en la última jornada y para que los catalanes tengan que jugarse la Liga en el Camp Nou ante el Deportivo, rival directo por la salvación.

Precisamente el Deportivo recibe al Levante, otro de esos equipos que aun no están salvados… pero casi. Para evitar la carambola que pudiera ponerles en Segunda, deben sacar algo de Riazor, de perder, el propio Deportivo se les pondría a solo dos puntos.
El Almería, aliviado por la resolución del TAD español que le devuelve los tres puntos de sanción (a la espera de lo que indique el TAS internacional), tiene una salida complicadísima ante un Sevilla que aun se juega la Champions. Eso sí, para los hispalenses no es tan acuciante alcanzar la cuarta plaza al tener la opción de ir a Champions por la vía de la Europa League, cuya final jugarán de nuevo contra el sorprendente Dnipro.
El Elche de un insuficientemente ponderado Fran Escribá, con más problemas en los despachos que en el campo, recibe a un Athletic que, como comentábamos del Sevilla, tiene aun objetivos a su alcance en Liga (el séptimo puesto) pero con la vista en la final de Copa. Probablemente es el partido con menos en juego de la jornada.
Otro de los partidos con menos en juego es el Córdoba – Rayo. Más allá de la nostalgia de que sea el último encuentro en El Arcángel de esta breve andadura del Córdoba en Primera y de la vuelta de Paco Jémez a su tierra, está la remota posibilidad de los vallecanos de alcanzar puesto europeo. Puede que pesen más las ganas locales por dejar buen sabor de boca a su público que el objetivo visitante.
El Villarreal, con el puesto europeo asegurado, recibe a un Málaga que quiere aferrarse a un séptimo puesto merecido por su juego atractivo pero en peligro por su irregularidad. Apunta a partido bonito, aunque no sea de los que más tienen en juego.
Y llegamos finalmente al lío de la parte alta de la clasificación. Lo componen tres partidos: el Valencia – Celta, que aunque directamente solo implique lucha por Champions para los locales y Europa League para los visitantes, puede repercutir en la decisión del campeón. El Espanyol – Real Madrid, donde los visitantes llegan en shock tras los dos empates en casa (ante Valencia y Juventus) que les asoman a un año sin grandes títulos y los locales se debaten entre las pocas ganas de darle el título a su vecino y archienemigo Barça o seguir peleando por el séptimo lugar. Por supuesto, el partido fundamental es el Atlético – F.C.Barcelona, donde quien consiga la victoria se hará acreedor del objetivo final, para los colchoneros la tercera plaza, para los culés, el título de Liga (y el primer paso hacia el triplete).

Será sin duda un partido intenso y disputado, aunque puede darse la circunstancia de que sendos empates en Mestalla y en el Power8 hagan que a ambos les sea suficiente con un punto ¿acabará la Liga con pasteleo? ¿Con exhibición del triplete dinámico blaugrana? ¿O la llevará el Atlético a la última jornada?
Curiosamente, hace poco más de un año los de Simeone se llevaban el título empatando en el Camp Nou. Ahora el Barça tiene la posibilidad de devolverles la moneda y cerrar el círculo. Será sin duda una bella tarde de domingo futbolero.