Cuenta con el presupuesto económico más bajo de la Primera División, concretamente 15,8 millones de Euros. Su estadio tiene una capacidad de 5.650 espectadores y su patrocinador es una empresa familiar llamada Hierros Servando. Un conjunto de elementos que definen una realidad humilde para un equipo de fútbol que juega en la máxima categoría de la Liga española, sobre todo, si comparamos a este club con rivales de calendario como Real Madrid, Atlético de Madrid o Barcelona.
Unos elementos que no han influido demasiado para conseguir que el Eibar, equipo dirigido por Gaizka Garitano, esté consiguiendo hacer frente a su primera campaña de la historia en la categoría de oro y haya logrado que, sin siquiera haber llegado a la mitad del curso, los armeros estén en la posición undécima de la tabla con 16 puntos, muy alejados por el momento del descenso y superando en la clasificación a rivales consolidados en la primera categoría como Getafe o Real Sociedad.

El equipo vasco debutó en Segunda División en la temporada 1953-1954, y a partir de ahí, su historia como integrante del fútbol español ha ido avanzando hasta encontrarse en el 2014 con su ascenso al máximo nivel del deporte rey. El equipo eibarrense ha estado casi tres décadas en Tercera división y 18 años en Segunda, esperando su momento para ascender y poder enfrentarse a los más grandes del fútbol español.
Y este año ya lo han hecho. Los vascos se han enfrentado a Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid perdiendo los 9 puntos de estos tres encuentros, lo que no significa ni mucho menos que el conjunto capitaneado por Txema Añibarro no plantase cara a semejantes gigantes, como bien hicieron.
Cuatro victorias, cuatro empates y cuatro derrotas conforman el palmarés del equipo en lo que va de temporada, después de haber vencido a equipos como Real Sociedad o Elche y de haber sacado un punto contra otros como Levante o Granada.

Es cierto que queda mucho calendario por delante, que obviamente no hay nada decidido a estas alturas de temporada, y que no sabemos si finalmente el Eibar aguantará en primera división la próxima campaña, aunque de momento, todo parece indicar que sí lo hará.
Independientemente de si sus objetivos de permanencia se consiguen a finales de mayo, lo que está claro, y lo que nadie podrá dudar jamás, es que los jugadores y el cuerpo técnico han dado todo para demostrar al mundo del fútbol que los clubes pequeños también pueden estar a la altura de los más adinerados y poderosos porque, al fin y al cabo, hablamos únicamente de jugar al fútbol, y ellos lo están haciendo.