En la jornada de ayer jueves en el Mundial de Rusia, los resultados del Grupo C dejaron a Francia clasificada para los Octavos de Final, a Perú eliminada y a Dinamarca y a Australia pendiente del último partido para dilucidar cuál de las dos acompaña a los galos a la siguiente ronda. Y luego llegó el desastre de Argentina.
Croacia pasó por encima de la albiceleste con una actuación magistral de Luka Modric e Ivan Rakitic. El madridista y el culé fueron los dueños y señores del partido, demostrando su talento, calidad y capacidad para imponer su criterio a la hora de controlar el balón y manejar a su antojo el encuentro. Ambos redondearon su brillante actuación con un gol.

Hay que ser justos y no centrar exclusivamente el foco de atención en la nefasta actuación argentina. A Croacia hay que reconocerle sus virtudes, que son muchas, su fútbol de muchos quilates y su propuesta atractiva y vistosa. Para dar palos a diestro y siniestro ya están los aficionados argentinos. Razones no les faltan, aunque los insultos y amenazas que están recibiendo los jugadores de la albiceleste y Jorge Sampaoli están fuera de lugar.
La situación de la selección sudamericana es extrema y se habla incluso de un posible despido inmediato del ex entrenador sevillista. Argentina está al borde de la eliminación tras empatar con Islandia y la derrota de ayer. Una victoria del combinado islandés en su partido de hoy ante Nigeria dejaría virtualmente eliminada a la actual subcampeona mundial. Como ya le ocurriera en el Mundial de 2002, la albiceleste puede verse apeada a las primeras de cambio.

Argentina tuvo muchas complicaciones para clasificarse para este campeonato y esa mala imagen en la fase de clasificación se ha extrapolado al Mundial. El nivel de juego es infame, carente de peligro, jerarquía y capacidad para elaborar un fútbol decente. Si a eso le unimos que Messi no ha rendido ni siquiera a la mitad de sus posibilidades y que parece descentrado y agobiado, tenemos como resultado la dramática situación del combinado argentino. Solo hay que verle la cara al crack de Rosario durante el himno en el partido de ayer para darse cuenta de la impotencia de él y de toda la selección.
Veremos cómo transcurren las próximas horas en torno al equipo argentino y si hay novedades sorprendentes y drásticas. La realidad es que la convivencia allí es difícil, con jugadores como Sergio Agüero haciendo declaraciones polémicas contra su seleccionador, con un audio que se ha viralizado por la red de una voz tan relevante como la de Diego Pablo Simeone criticando duramente al equipo y con la sombra de una sorprendente e inesperada eliminación temprana sobrevolando por encima de las cabezas de los argentinos. Expectantes quedamos.