Anoche tuvo lugar el choque de ida de los cuartos de final de la Champions League que enfrentaba al Chelsea contra el Real Madrid. Se reeditaba la eliminatoria de semifinales de la pasada temporada, que acabó con el pase y posterior título de campeones para los londinenses.
Sobre el partido, se esperaba una actitud pasiva de los blancos, replegados y esperando su momento para hacer daño en las contras, cediendo la manija a los locales. La única sorpresa en el once fue la del uruguayo Fede Valverde, que respetó el 433 situándose escorado a la banda.
El Chelsea por su parte salió con una alineación similar a la de la pasada eliminatoria, con la inclusión de Azpilicueta como carrilero izquierdo, decisión cuestionable y fácilmente criticable a toro pasado.
Además, sin esperar una gran presión por parte del Real Madrid, Thomas Tuchel optó por Jorginho en lugar de Kovacic, lo que dotaba a su equipo de más posicionamiento y organización.
El partido comenzó con lo esperado, pero con un Real Madrid muy hiriente en sus contragolpes, dónde Vinicius sacó las costuras a un Christensen que se encontraba muy solo, debido a las acometidas ofensivas del carrilero inglés Reece James. Así fue, que en el minuto 10 llegó la primera ocasión para los blancos con un disparo del brasileño estrellándose en el larguero.

No obstante, la presión del Chelsea daba sus frutos, pues un error de Militao (que acabó con amarilla para el brasileño y consecuente sanción para la vuelta) casi acaba en gol tras la falta botada por Reece James.
A los 20 minutos, Karim Benzema hizo su aparición, marcando el 0-1 tras un cabezazo a la red. Es el francés el que inicia la jugada, muy participativo en el medio campo dónde ayudaba en la salida. Vinicius se desmarca y acaba asistiendo a un Benzemá libre de marca, pues Rudiger no acompañó la vasculación de Thiago Silva.
No se quedaba ahí la cosa. 3 minutos hicieron falta para que de nuevo Karim, y de nuevo de cabeza, aprovechara una delicia de pase de Modric para poner el 0-2.

Un Chelsea descolocado, en el que Kanté quedaba retratado por su poca presión ante Kroos, se intentaba sobreponer a los dos golpes de los de Ancelotti. Y lo lograron. A pocos minutos del descanso, Kai Havertz (de lo más destacado de los blues) recortaba distancias de cabeza, tras una mala acción defensiva de Carvajal, en la que el alemán le ganaba la posición.
Así se llegó al descanso, en una primera parte casi sublime de los blancos, en la que su plan salió a pedir de boca, aprovechando sus ocasiones y minimizando el peligro rival. Primer round ganado por Ancelotti, que sacrificaba a un Modric más lateralizado, para ayudar a Carvajal en la marca y en la salida de balón. Por su parte el Chelsea estaba generando muy poco peligro, y Christensen y Kanté acabarían siendo sustituidos al descanso para dar entrada a Ziyech y, ahora sí, a Kovacic, pasando a defensa de 4.
De poco valdría el plan de Tuchel, pues el senegalés Édouard Mendy acabaría por boicotearlo en el primer minuto de la segunda mitad. Un error clamoroso fuera de su área haría que, Karim Benzema pusiese el 1-3 en el marcador. De nuevo Karim aprovechándose de un fallo grotesco de un portero. De nuevo Karim marcando en el encuentro, y de nuevo Karim logrando un hat-trick tras el de la anterior eliminatoria ante el PSG.

Curiosamente, llegaron aquí los mejores minutos del Chelsea, que hizo méritos para marcar, al menos, un gol más en la eliminatoria. Pero Courtois con una gran parada a un disparo de Azpilicueta y la poca puntería de Lukaku y Mount a 20 minutos del final hicieron que el marcador no se moviese.
Una segunda parte en la que el Real Madrid apenas volvió a enfrentarse al guardameta senegalés y en la que el Chelsea se acercó más a la idea de juego que le gustaría. Pero la eficacia en ambas áreas fue crucial para que los blancos pusiesen muy de cara la eliminatoria.
Tras el partido de ayer, el Real Madrid se postula, como casi cada año, a candidato a ganar la orejona y Benzema y Courtois pueden acercar la decimocuarta a las vitrinas del club blanco.
Ha vuelto el Madrid de la Champion,el temible rival en su competición preferida y evidentemente se ha ganado no solo el respeto sino la admiración en Europa y la consideración,seria y argumentada ,de candidato al triunfo.Y Benzema en un momento de dulce acompañado por Courtois,delantero y portero que se han echado el equipo a sus espaldas y junto a Modric y Vinicius están aupando a su equipo a cotas importantes y hace años añoradas.
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