Hace apenas un par de horas ha tenido lugar, en la Ciudad del Fútbol de las Rozas, el sorteo de semifinales de la Copa del Rey que ha emparejado a los cuatro equipos clasificados. El partidazo viene de la mano del Atlético de Madrid-Barcelona, que se ha convertido en uno de los grandes encuentros de las últimas temporadas, sin olvidar el Alavés – Celta, que dará a uno de los dos equipos la oportunidad de disputar una final de Copa contra uno de los grandes de nuestra Liga, y por supuesto, optar a ganarla.
No tendremos que esperar mucho para disfrutar de estos encuentros pues será la semana que viene cuando se disputen los partidos de ida donde ya podremos intuir, después del pitido final, quienes serán los dos equipos que jugarán la final del próximo mes de mayo.
Una final en la que seguro no estará el equipo de Zidane que fue eliminado por el Celta el pasado miércoles, tras un partido en el que los blancos estuvieron desorientados y no fueron capaces de remontar.

Con un gol en propia puerta, marcado por Danilo, el Madrid se despide de la Copa del Rey diciendo adiós a un posible triplete y creando así los murmullos acerca del mal comienzo de año de los merengues.
Un inicio de 2017 que nada tiene que ver con el del Barcelona, al que parece que en este nuevo año le sale todo. Y es que tras la goleada de anoche a la Real Sociedad por 5-2, el equipo de Messi sigue aspirando a un posible triplete esta temporada. Además, el foco mediático negativo se ha centrado ahora en el eterno rival. Como siempre vengo diciendo, el fútbol no tiene memoria.
El equipo de Luis Enrique derrotó a la Real en casa con goles de Messi, Luis Suárez, Arda y doblete de Denis Suárez. A punto de disputar la tercera semifinal consecutiva de Copa, los jugadores han dejado atrás las dudas acerca de su juego y rendimiento con la intención de conquistar los títulos a los que aspiran.

Del mismo modo lo harán los colchoneros quienes se van a enfrentar la próxima semana al rival más duro, el Barcelona, después de haber ganado la eliminatoria de cuartos al Eibar. Será la semifinal número 31 del Atlético para Koke y compañía, la cual afrontan con la única intención de vencer y dar un pasito más hacia el título. Porque sin duda alguna, títulos es lo que quieren los rojiblancos.
Al igual que el Alavés, que llega por quinta vez a una semifinal de Copa en su historia, aunque es la primera vez que lo hace jugando en la máxima categoría del fútbol español. Y el Celta, con el ego subido tras cargarse al equipo de Cristiano Ronaldo que mostró su peor cara, disputará la undécima semifinal.
Lo que viene a ser una buena parrilla deportiva de cara a la próxima semana que seguirá poniendo emoción a lo que ya empieza a ser la recta final de la temporada y donde todos se la juegan.