El partido de Alves fue espectacular. Hasta el minuto 69. Lección magistral jugando de pivote cuando el equipo atacaba. El gran despliegue defensivo del Atlético forzaba a los blaugrana a sacar la pelota a través de Araujo y Piqué por lo que se sumó el brasileño. Xavi sorprendió dando este rol al lateral, mostrando que las comparaciones del técnico de Terrassa con Guardiola no son casualidad.
Lamentablemente los encuentros duran 90 minutos y justo en ese nefasto 69 Dani Alves vio una merecida roja en lo que fue una acción incomprensible.
Como reza el título del artículo, la actuación de Alves fue el claro reflejo de la del Barsa como conjunto. Magistral primera parte con un juego asociativo y gran movilidad en ataque ante un Atlético que se había adelantado como muestra de que el bagaje defensivo culé sigue siendo pobre.
Tras subir el cuarto gol al marcador, Simeone reaccionó metiendo un triple cambio. Lo que en principio parecía poco comprensible quitando a Joao Félix y manteniendo a Luis Suárez se convirtió en un cambio de guión con un Atlético mordiendo en la salida de balón. Lamentablemente, y de manera sorprendente, el peligro del Atlético se diluyó tras la expulsión.
El Barcelona vuelve a puestos Champions tras 20 jornadas. Se ve el trabajo en ataque con ciertos automatismos. Queda pendiente el tema defensivo, sobre todo a balón parado, y mantener el ritmo durante aún más tiempo.
En cuanto a Xavi haga lo que haga tendrá poco mérito. Si pierde es un don nadie, si gana lo es por los fichajes que le han hecho. Es curioso comprobar como la memoria es selectiva y se olvida de plantillas con Messi y Griezmann donde el juego era un auténtico esperpento.
En resumen, buen partido y mucho trabajo por hacer, sin embargo parece que ya llueve menos en Can Barsa.
Se pudo ver un Barcelona bastante mejorado en cuanto a juego y ataque pero aún dubitativo en defensa,sin embargo en esta Liga tan irregular y mediocre aún puede aspirar a una calificación más acorde con su historia.
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